domingo, 14 de septiembre de 2014

¿Qué hay de nuevo, viejo?


De acuerdo, bien, les debo unas disculpas por no haber escrito el jueves. Fue un simple problema de inspiración. Ahora se me va seguido, no sé de qué escribirles. Por lo que haré un pequeño mix de temáticas, ojalá les guste.

Acabo de descubrir una de las maravillas del mundo, el choclo tostado. ¡Es delicioso! Parecido al maní confitado, la verdad, pero sin la fritura. Es imposible, un reto, parar de comerlas, puesto que son un verdadero vicio. Algunos son adictos a la droga, al alcohol, al cigarro. Otros, al choclo tostado.

Haciendo referencias a una reseña que hice anteriormente, empecé la segunda temporada de Hemlock Grove. Dicen que la primera es tan sólo una introducción a la segunda. Eso espero, le tengo fe, y por lo que he visto es más morboso que los capítulos anteriores. La escena del primer capítulo del hombre auto-flagelándose me dio asco, es que me da náuseas esas cosas. Aparte, todos los fans queremos saber qué sucede con Shelley. ¡Es tan adorable!

Cambiando terriblemente de tema, en Chile ya comenzaron las fiestas patrias. En estas fechas son muchas las cosas que se celebran. Días atrás, el 11 de septiembre, se memoró el Golpe de Estado que hasta el día de hoy separa al país. Ya cerca, el 18, celebremos la independencia, mejor dicho la Primera Junta de Gobierno. Los chilenos ya empezamos a ir a las fondas, a comer las empanadas y a bailar cueca. Ya, no es que bailar cueca todo el tiempo, por lo menos en clase de gimnasia, es entretenido. Lo mejor son las ferias de las fondas, donde uno puede comprar cualquier cosa. Claro, además de los volantines.

¡Ah! Les quería informar también que existe un programa de los antiguos Happy Tree Friends. No me acuerdo muy bien de en qué canal, pero, por lo menos en mi programación, era el 32. Tantos recuerdos, ¿No? Esos animales tan adorables que se sacaban la mugre y terminaban muriendo. Es tan chistoso, aunque a veces muy asqueroso.

Sí, sí, estoy en la luna últimamente y no sé de qué escribirles. Por eso se me ocurrió que ustedes pidan el próximo tema, ¿Les parece? Pongan en los comentarios de qué les gustaría que hable. Y bueno, si para el lunes sigo con esta crisis, pues la próxima entrada será para el martes, que creo que necesito ya un respiro corto. 


¿De qué quieren que hable?

martes, 9 de septiembre de 2014

Fiesta pagana, de Mägo de Oz


No, no hablaré sobre la iglesia o la religión, y es probable que nunca lo haga en este blog. Esta tarde se me ocurrió hablarles de lo que antes era mi grupo favorito. Se llama Mägo de Oz, es un grupo español de folk-metal, o sea, mezcla el metal con la música folclórica de su país, bastante parecida a la música celta. Es una de las cosas que más llama la atención, la forma perfecta en que combinan el sonido de la flauta, o el violín, con el de la guitarra eléctrica.

Sobre las letras de sus canciones, hablan mucho de la Edad Media. Por ejemplo, en En nombre de Dios, o incluso en Fiesta pagana habla sobre vivir la fe en un mundo medieval, donde el clero utilizaba el nombre de Dios para asustar, vender el perdón y ganar plata. Como ven, hay había mucha corrupción, lo que hace que sea una de las temáticas presentes en sus canciones en general. No conozco tanto de ellos, por si acaso. También, por otro lado, en Hoy te toca ser feliz mencionan la tierra de Oz, puesto en el nombre del grupo, en una canción más alegre que las demás.

Esta banda la escuchaban mis hermanas mayores hace ya años. Tengo muy lindos recuerdos, de los viajes a Algarrobo o a Pucón, en lo que los escuchábamos. Por supuesto yo no entendía para nada lo que decían, pero por alguna razón adoraba las canciones, probablemente gracias a las melodías, los instrumentos, que son pegajosos y originales, atrayentes.

Luego, pasé años sin escucharla, hasta que un Año Nuevo hicimos karaoke, y me acordé de una de sus canciones, Quiero oír tu voz, por lo que saqué la letra por internet para cantarla. Entonces descubrí de lo que me estaba perdiendo. Me volví fanática. Sin embargo, aunque una había escuchado una canción, por lo general mis amigas no conocían al grupo.

Un día, hablando de algo que no recuerdo con un amigo, resultó que ambos conocíamos a Mägo. Adivinarán que me puse demasiado contenta, más aún cuando, otra noche, además descubrí que otra amiga conocía El bar de los muertos. Cantamos desafinadamente, y lo pasamos muy bien.

No es fácil distinguir los motivos por los cuales nos gusta. Supongo que es porque cada uno tiene los suyos. A pesar de eso, si hay algo que todos los fans tenemos en común, es la certeza de que la mezcla que hacen de música celta, clásica, con la música hardcore es incomparable. Yo ya no escucho tanto metal, pero me sigue encantando Mägo de Oz, levanta el ánimo, te hace mover por dentro, como digo yo.

Esta es una de mis canciones favoritas, si quieren después les puedo dejar otra. Me despido de ustedes, un gran abrazo y nos vemos.


lunes, 8 de septiembre de 2014

It's adventure time!


Yo pienso que es hora de que hable de este programa que adoramos, que sin duda alguna pasará a la historia. Gracias a que una amiga me regaló un sticker de Marshall Lee, que adoro y admiro en clases, se me ocurrió hacer una entrada de Hora de Aventuras, ya que tanto lo merece.

Para empezar, debemos considerar que estas aventuras, las más bizarras del mundo, están situados en un tiempo post-apocalíptico. No sé qué tan oficial es esta versión de la historia, porque no he podido ver mucho esta serie últimamente. Cómo lo extraño, en verdad, sufro. A pesar de todo, me gusta la idea de inventar una tercera guerra de nivel mundial, una ya nuclear. Lo hace todo más interesante. Perturbador, sí, muy perturbador. Pero interesante.

Lo mejor que tiene Hora de Aventuras, es que en una serie simple, de humor inocente y que cualquiera lo puede disfrutar. Y su base está en eso, en un humor tan simple que es absurdo, tan sencillo que ni lógica tiene. ¿Quién quiere lógica cuando se puede tener un mundo tan hermoso como el que crearon Pendleton Ward con Mike Holmes.

Es tan cómicamente absurda, que llega a todos. Con una sola imagen atrae, te hace reír, e incluso en algunos capítulos te hace llorar Marceline y el Rey Helado, oh Díos mío. Es imposible que no les guste, en serio.

He aquí una lista con mis personajes favoritos:

-Finn: el protagonista, es un chico de 12 años que sueña con ser un aventurero y guerrero. Creo que solamente un par de veces se le ve sin su gorrito kawaii.

-Jake: hermano adoptivo de Finn, de 28 años, es un perro mágico que es capaz de estirarse lo que quiera. Bueno, además de poder hablar, hay que dar por obvio que en este programa todo ser/cosa/criatura habla.

-BMO: es una consola de videojuegos muy tierna.

-Marceline: princesa vampiro, es una de las mejores amigas de Finn. Jake le teme en un principio. Fanática del rock, y tiene un hacha que usa como bajo.

-Fiona: es la versión femenina de Finn. Se introduce en un cuento, en el cual todos los personajes cambian de género.

-Cake: también es una versión femenina, de Jake.

-Marshall: versión masculina de Marceline, muy mino y muy shippeable con el Dulce Príncipe.

-Finn bebé: es Finn de guagua, que aparece en un capítulo bailando y cantando sobre su trasero, en los recuerdos del protagonista

Como ven, no puse a todos los personajes, de hecho me faltaron algunos importantes. Es que yo sólo puse los que más me gustaban.

Algo que no podía faltar; los fandoms. (*redoble de tambores*) ¡Los más shippeables!

-Finn y Marceline
-Fin y la Princesa Flama
-Finn y la Dulce Princesa
-Marshall y el Dulce Príncipe
-Fiona y Marshall
-Fiona y el Dulce Príncipe
-Finn y Fiona
-Jake y Lady Arcoiris

 Mis capítulos favoritos son aquellos en los que los personajes cambian de género, ya saben en "Hora de Aventuras con Fiona y Cake" y "Bad Little Boy". Finalizando este post, les dejaré este video que encontré por ahí fisgoneando, es una supuesta escena perdida, de esas que no pasaron por la tele. Se trata de una canción que Marshall le dedica a Fiona en la versión paralela del programa.


¿Les gusta Hora de Aventuras? ¿A quiénes shippean más? Buenas tardes, damas y caballeros.

domingo, 7 de septiembre de 2014

Una verdadera vampirilla

El soldado de las montañas-cuento


El gran Soldado de las Montañas era temido por los enemigos del Imperio Chino. Todos lo conocían, y también a su alter-ego, pero no sabían que era la misma persona.

Era indomable en las batallas, se conectaba con su espada como si fuera una extensión de su brazo. Dejó atrás la torpeza y la duda para convertirse en el orgullo del capitán Shang. Decían que era igual a su padre. Éste, aunque cojo, tenía un espíritu de valor que no dejaba entrever debilidad en ningún punto.

Todo iba bien hasta que asumió como Emperador el ambicioso nieto del antiguo gobernante, que devoraba todo bien que estaba a su paso. Decidió que su imperio no era lo suficientemente grande para su poder, y mandó al ejército para expandir su territorio, reorganizándolo para mejorar su estrategia.

Ante estas reformas, el Soldado de las Montañas y el capitán Shang intervinieron para pedir que quedaran juntos, argumentando lo importante que era el vínculo tutor-estudiante. El Emperador aceptó, dejando en claro que, al menos, algo de bondad tenía.

Unas semanas más tarde, se anunció el matrimonio del famoso Soldado. Toda la ciudad lo celebró, felicitando al afortunado. Aunque la alegría no duró más allá de un par de días, ya que él debía ir al campo de batalla.

En el crudo invierno, en un atardecer digno de admirar, se realizaba una pelea contra un pueblo vietnamita. Un soldado enemigo, ágilmente alzó la espada y se colocó a la espalda del capitán. El Soldado de las Montañas, trilladamente, se interpuso entre ambos, y recibió la cuchillada en el pecho.

Shang, al notarlo, tomó el cuerpo del caído, y apoyó su oreja en el cuerpo. No escuchó más el retumbar de su corazón.

Gritando, ordenó la retirada de la tropa, y se escondió detrás de una roca junto al cadáver. Sacó de su bolsillo un par de anillos, y le puso uno al cuerpo sin vida, con delicadeza y amor. El Soldado de las Montañas nunca supo que era una mujer felizmente casada.


Mulán

jueves, 4 de septiembre de 2014

Hemlock Grove


Técnicamente, no debería estar escribiendo la reseña, ya que no he visto el último capítulo de la primera temporada aún. Sin embargo, esta serie amerita que lo haga de todas formas. Este programa exclusivo de Netflix fue creado por Brian McGreevy, autor de la novela, del mismo nombre, en el que está basada la serie, y Lee Shipman.

En pocas palabras, la trama se basa en que un hombre lobo adolescente deberá aliarse con un compañero suyo, hijo de la familia más importante de la ciudad, para detener las brutales matanzas ejecutadas en Hemlock Grove, Pensilvania. Den por supuesto que estoy simplificando al máximo la historia.

Los primeros capítulos te atrapan, te integran en una realidad desconocida. Te invita a conocer una ciudad que, aunque se parezca a cualquier otro lugar del mundo, te va demostrando a lo largo de los capítulos que definitivamente no lo es. Bastante sangrienta, debo admitir, he tenido que ver escenas que no me puedo sacar de la cabeza. Lo que no indica que no deban verla, es buenísima, saca lo más morboso de nuestro interior.

Honestamente, en los capítulos siguientes me parecieron algo así como un relleno. Eran interesantes, sí. Pero solamente los veía para ver qué pasaba más adelante. No pasaba nada vital, pienso que debieron haber inventado algo importante para mostrarlo en esos capítulos, sin que revelara el final. O sea, daba para más de lo que es, se podían sacar muchas historias de muchas partes.

Como les dije antes, todavía no veo el episodio final, estoy en el penúltimo. El que tiene el final más sorprendente que visto, claro, a excepción del último, espero. Los últimos capítulos te vuelven a envolver. Cuando se juntan estos dos amigos, y demuestran juntos que han vuelto y que matarán a la bestia asesina. Es la parte de la historia que más atrae.


Amé al gato, y sufrí lo que le pasó en el penúltimo capítulo. Para honrarlo, un gif de él con Roman.

Ahora, vamos a los shippings. Por si acaso, esto sólo deberían verlo quienes han visto el programa. Estoy extrañamente confundida sobre con quién debería quedarse Peter, si con Letha, con Shelley o con Roman. Partiendo por Peter y Roman, no siento que deberían estar juntos, son más como hermanos que como amantes. Letha, bueno al principio la odiaba porque gracias a ella Peter no estaría con Shelley. Luego los vi juntos, y pensé que tal vez sí son una gran pareja. Por último, no podía faltar Peter y Shelley. Shelley es mi personaje favorita, lejos. Es tiernísima, con un gran corazón.

Mis anti-shippings; Norman y Olivia. Ellos nunca tuvieron que estar juntos. Encuentro horrible que él esté engañando a su esposa, a quien sin haberla amada le concibió una hija, por una arpía. No me gusta Olivia.

¡Véanla! En cuanto la terminen, díganme y quizás podamos fangirlear un poco, jijij. Advertencia: el programa puede ser algo porno.

martes, 2 de septiembre de 2014

¿Y qué pasó?




Ese momento en el que miras a tu amiga, y te preguntas, ¿Qué pasó? Tú eres la misma. Ella probablemente es igual a como era antes. Entonces, ¿Qué cambió? No parece haber motivo para una separación tan drástica. Es algo que intriga. Más que eso, confunde, nos hace entrar en un estado de shock en el cual somos incapaces de pensar con claridad. Y si no hay claridad, ¿Qué otra cosa nos puede ayudar a tener confianza en el futuro? Sin claridad, esa inseguridad puede dar miedo. Podemos no tener claridad de bastantes cosas. Pero cuando perdemos la claridad del cariño que les tenemos y que nos da la gente que nos rodea, es algo que va más allá. Se nos va la fe de que las personas que amamos estarán ahí para siempre, con nosotros. Nos damos cuenta de que, por más que los queramos mantener a nuestro lado infinitamente, no podemos manejar las vueltas de la vida. No somos dioses. Todo aquello que no podemos controlar nos aterra, lo que muchas veces tiene una razón más que válida.

El día a día es demasiado diferente a como solía ser antes. Ahora, cuando te sonríe preguntándote cómo estás, tienes la sensación de lo hace por deber. Te preocupas de que no le intereses en realidad. Nadie tiene las palabras perfectas, sin embargo tenemos un  hombro perfecto para que cualquiera llore. ¿Para qué más fue creado? Para poder decir lo que temes, poder expresar esa distancia que te aleja de la otra persona, envolviéndote como cadena. Los hombros merecen una oda, unas gracias, un reconocimiento, un día en su honor. Porque son de los pocos que tienen la llave que abre el candado de esa cadena.


Aunque estés con un grupo numeroso, por alguna razón te sientes sola. Nada importa si esa amistad que creías duradera se va decayendo. Tu inocencia va dando paso a una sed angustiosa y desesperante de amor. Solías tener esperanza. ¿Dónde quedó? ¿Y qué pasó con ella? Te estás mostrando a ti mismo lo peor de ti. Quisieras no hacerte tanto daño, que tu mente dejara de jugarte una mala pasadas. Lograr fingir que la indiferencia no te está matando lentamente por dentro. Los podrás engañar a todos, aunque, no podrás engañarte a ti mismo.

Sabes que la lejanía es comparable a un veneno. Un veneno altamente tóxico, que no se consume por la boca, sino a través de los recuerdos. Recuerdos dolorosos. Algo te impide dejar de tomar ese veneno. Te va a matar, pero tu garganta pide y pide.

Lo peor de todo es que no hay respuestas. O, al menos, no las tiene ninguna persona que conozcas. Podrán intentar darte una. Mas no podrás evitar preguntarte, si acaso no era una respuesta incorrecta. Si no estás segura, si no confías, ¿En serio vale?

No nací para contestar. Es más, tengo mucho que preguntar todavía, tampoco tengo mi vida asegurada, y me da miedo pensar en lo que podría llevar a pasar más adelante. Por otro lado, sí estoy acá para decirte esto; sólo tú lo sabes. Es complicado de entender porque implica una gran responsabilidad. No debes olvidar que eres inteligente, con una gran sabiduría. Cultívala, y verás que ya no necesitarás hacer preguntas para saber que podrás con las respuestas.

Tal vez no las tengas. Pero podrás con ellas.

lunes, 1 de septiembre de 2014

Cumpleaños


¡Hola a todos! Hoy es mi cumpleaños, y estoy muy feliz, saben que es emocionante ser un años más vieja. Me regalaron un nuevo celular, ya que el que tenía me lo robaron, no fue mi culpa, y no pienso desprenderme de él nunca, lo cuidaré como hueso santo, lo prometo. Y de paso le demuestro a mi mamá que sí puedo cuidar las cosa. Además, ¡Mi torta es de alfajores! Sí, sí, envídienme. Su envidia alimenta mi ego. Bien, bien, dejaré de ser tan pesada. Alfajores.... ¡Alfajores!

Aprovecharé este momento para hablar de mis recuerdos. Me acuerdo que de chica, mi abuelita me pagaba para limpiar el piso de su casa. Ella ni pensaba en agacharse para hacerlo así que, para eso estábamos mi hermana chica y yo. Como mi mamá trabajaba, mi abuela siempre nos cuidaba.

Cómo no hablar de las películas de la infancia. Veía tanto Mulán que mi hermana menor se chateaba. También veía Tarzán, amaba a Jane. Teníamos la película del Coyote y el correcaminos, me moría de risa cada vez que la veía, y después la vi con mis primos chicos Ah, y no me olvido del Camino hacia el Dorado, un largometraje que mis hermanas mayores me mostraban, con el Príncipe de Egipto. Amaba verlas, son un clásico de la niñez.


Por otro lado, las mejores series que, por lo menos mi generación veía de pequeños, era Sonic X, Pokémon, Dave el Bárbaro, por supuesto, Barney. Extraño Jetix. El único programa bueno que dan en Disney XD, el canas de reemplazo, era Dave el Bárbaro, e incluso la dejaron de transmitir, no sé por qué. Era tan hermoso ese programa.

Mátense, me acaban de regalar una caja grande de bon-o-bon.

Volviendo al tema, recuerdo que otro programa que me encantaba era Isla del Drama. Se la mostré a una amiga el viernes. Claro que el primer capítulo no era para nada el más chistoso, esa serie era cada vez más buena. Y me gustaría retomar las temporadas posteriores a la primera para conocer a la nueva generación de la secuela que recién salió.


Otras cosas de las cuales me acuerdo, sin relación con películas o series, eran los juegos. En mi colegio había dibujado un juego de luche, en el que jugábamos los recreos. No era buena, pero al menos servía para matar el tiempo y hacerse amigas.

Una vez, mi curso fue castigado por no haberse ordenado cuando teníamos que entrar a la sala de clase. Entonces nos mandaron en el recreo del almuerzo a hacer fila en ese lugar. Una compañera del curso paralelo se nos acercó y nos dijo, "qué vergüenza". ¿No tendrá sentido de la discreción, me pregunto yo?

Por último, desde chica me pregunté qué diferencias había entre un colegio de puras mujeres y uno mixto. Siempre pensé que yo hubiera sido diferente si me hubieran puesto en un colegio mixto, no sé. Eso si, no me arrepiento de estar en mi colegio, ya que tengo amigas maravillosas.

Si por casualidad la que esté leyendo esto también está de cumpleaños, ¡Felicidades, eres un años más viejo! Así, aumentando la autoestima como siempre, adiós, bellos pequeños.