
El día a día es demasiado diferente a como solía ser antes. Ahora, cuando te sonríe preguntándote cómo estás, tienes la sensación de lo hace por deber. Te preocupas de que no le intereses en realidad. Nadie tiene las palabras perfectas, sin embargo tenemos un hombro perfecto para que cualquiera llore. ¿Para qué más fue creado? Para poder decir lo que temes, poder expresar esa distancia que te aleja de la otra persona, envolviéndote como cadena. Los hombros merecen una oda, unas gracias, un reconocimiento, un día en su honor. Porque son de los pocos que tienen la llave que abre el candado de esa cadena.

Aunque estés con un grupo numeroso, por alguna razón te sientes sola. Nada importa si esa amistad que creías duradera se va decayendo. Tu inocencia va dando paso a una sed angustiosa y desesperante de amor. Solías tener esperanza. ¿Dónde quedó? ¿Y qué pasó con ella? Te estás mostrando a ti mismo lo peor de ti. Quisieras no hacerte tanto daño, que tu mente dejara de jugarte una mala pasadas. Lograr fingir que la indiferencia no te está matando lentamente por dentro. Los podrás engañar a todos, aunque, no podrás engañarte a ti mismo.
Sabes que la lejanía es comparable a un veneno. Un veneno altamente tóxico, que no se consume por la boca, sino a través de los recuerdos. Recuerdos dolorosos. Algo te impide dejar de tomar ese veneno. Te va a matar, pero tu garganta pide y pide.
Lo peor de todo es que no hay respuestas. O, al menos, no las tiene ninguna persona que conozcas. Podrán intentar darte una. Mas no podrás evitar preguntarte, si acaso no era una respuesta incorrecta. Si no estás segura, si no confías, ¿En serio vale?
No nací para contestar. Es más, tengo mucho que preguntar todavía, tampoco tengo mi vida asegurada, y me da miedo pensar en lo que podría llevar a pasar más adelante. Por otro lado, sí estoy acá para decirte esto; sólo tú lo sabes. Es complicado de entender porque implica una gran responsabilidad. No debes olvidar que eres inteligente, con una gran sabiduría. Cultívala, y verás que ya no necesitarás hacer preguntas para saber que podrás con las respuestas.
Tal vez no las tengas. Pero podrás con ellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por comentar! Me interesa saber lo que piensas. Miau